Inicia el viaje a Europa, la salida en San Diego muy bien, todo tranquilo. Amanecí con hambre y sin ganas de algo bien definido por comer, pasaba por varios locales de comida y nada se me antojaba. Decidí no comer en San Diego y me fui directo a mi zona de salida para esperar la hora de abordaje del vuelo por american airlines. Durante el vuelo sólo tomé un vaso con jugo de naranja y un bote de Dr. Pepper. El viaje fue bueno, pocas turbulencias hasta casi llegar a Chicago donde sí hubo algunas pero nada que demandara descarga de adrenalina. El tiempo no se sintió lento porque vi una buena película sobre educación de dragones, divertidos los dibujos animados. Llegando a Chicago, empieza un poco el caos, había que salir de la terminal para ir a la terminal internacional, para eso se debía tomar un tren eléctrico que transporta a los pasajeros entre terminales, lo hice y me dirigí a el mostrador de british airways, no había fila y la señorita que me atendió fue muy amable. Después de registrarme pase a la revisión de seguridad y debo decir que no me han detenido nunca, lo cual me agrada por aquello de perder tiempo en esperas. Ya pasada la seguridad y volver a ponerme el cinto, los tenis, regresar monedas a mis bolsillos me encamine a la zona de salida de mi avión, ahí ya no soporte el hambre y decidí comprar unas papas lo más conocido fueron springles de sour cream y onion, ya después del despegue me las empecé a comer con aquella hambre que me detuve sólo unos momentos por la pena de verme así Jaja. Olvidé mencionar que pase dos osos, el primero al meter mi maleta en el compartimiento pues no encontraba la forma, hasta que un asistente de vuelo me ayudó. El segundo oso y el más evidente fue cuando servían café y te, yo pedí café porque me estaba durmiendo de fea forma, entonces el asistente de vuelo me pide la taza y extiende con su mano una cajita con un papel tipo servilleta, entonces yo todo menso que agarró el papel como sí fuera para mi y me vuelve a pedir la taza hasta que recapacite y le puse la taza, la trajo hacia el, me sirvió en ella, volvió a extender la cajita con la servilleta y está vez con mi taza llena con café, Jajajaja super mega oso que simplemente no le di importancia para no verme peor.
Durante el vuelo, sirvieron una cena formal, tenían a escoger pollo con arroz o salmon con pasta, como pollo muchas veces y salmos de vez en casi nunca, así que pedí el salmón y recordé porque no soy tan amante del salmón, y es su sabor fuerte. Pedí vino blanco, el cual me supo un poco fuerte así que no me lo termine, el postre fue un budin de crema con cubierta de mango, estaba rico. En sí toda la cena lo fue. Después de eso empecé a sacar mi arsenal de aditamentos para descansar o mejor dicho disminuir el cansancio que sería estar sentado por 6 horas y 50 minutos. Así que me puse mis audifonos que reducen el ruido externo y puede uno escuchar música o la película que uno escoge, pero o sorpresa en San Diego me di cuenta que se habían quedado prendido y obvio se agotó la energía de las baterías alcalinas que tenían, así que me jodi con la reducción del ruido como ventaja de mis andinos, sin embargo sí me ayudaron mucho. Me coloqué mi cojan inflable en el cuello, recline el asiento y empecé a descansar muy tranquilo, me quedé parcialmente dormido por lapsos de tiempo y me agradó mucho quitarme los tenis. Desperté para el desayuno y sólo fue un muffin de blueberry con café (está vez ya supe poner la taza en la cajita) empecé a escribir esto mientras desayunaba, estamos a punto de aterrizar en Londres, desafortunadamente no podré salir e ir a la ciudad, pero quizá en el regreso. Ahorita como casi siempre pasa al ir descendiendo o después de despegar, empiezan ciertas sacudidas por turbulencias. Por el momento sí no pasa nada más, volvere a escribir desde el aeropuerto London Heathrow, en el cual espero haya internet gratis porque de no ser así no se que haré Jaja.
Saludos.
P.D. En Londres son las 6 de la mañana.
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